Cuando enviamos una lista de materiales a una empresa de montaje de circuitos debemos de ser cuidadosos y eliminar al máximo las posibilidades de error. Aunque los programas de diseño exportan las listas de materiales (BOM, del inglés Bill Of Materials), debemos revisarlas, y comprobar que no se nos ha escapado nada. Una lista de materiales no deja de ser una tabla, donde para cada componente indicamos lo necesario para su compra y su montaje. Damos a continuación unas recomendaciones para crear una primera lista.
En primer lugar, agruparemos los componentes según su referencia de fabricante, ya que este campo indica de forma unívoca qué componente queremos montar. Con esta agrupación, la lista de materiales deberá tener al menos estos campos:
- Referencia: guardar cuidado de que esté completa, ya que las letras finales de muchos componentes cambian su formato físico, y esto podría hacer imposible su montaje.
- Fabricante: aunque la referencia esté clara el fabricante ayudará a quien compra el material saber a donde dirigirse con más facilidad.
- Cantidad: cuantos componentes con la misma referencia van en la placa.
- Nombre: qué nombre tiene cada uno de esos componentes en la placa.
- Descripción: una descripción del componente. No es un campo necesario, pero sí interesante, porque nos puede hacer detectar errores en una referencia.
- Huella: qué huella tiene el componente. Igual que el anterior, no es necesario, pero nos puede ayudar a encontrar errores.
- Observaciones: una columna donde indicar cuestiones relativas al componete, por ejemplo:
- Si es un componente genérico (que valdría de otra marca cualquiera), o si tienen alguna alternativa ya validada.
- Si se ha de montar de alguna manera concreta (componentes con patas que se monten a cierta distancia de la placa, por ejemplo).